Seguramente te hayas fijado que en el frontal de tus alimentos habituales han colocado un sistema de etiquetado por colores de un tiempo a esta parte llamado Nutriscore.

Este sistema de etiquetado frontal se está instaurando en muchos países de Europa, no solo en España, y  pretende hacer más fácil elegir entre los alimentos más sanos a nuestra disposición en el super. Para ello, los productos serán evaluados según su composición, la cantidad de azúcar, fibra y otras sustancias que afectan a nuestra salud. Esta fue una medida que ya habían anunciado hace algún tiempo desde el ministerio de salud, y desde hace unos meses, ya empezamos a ver este sistema de etiquetado por colores.

Normalmente los etiquetados estaban en la parte de atrás de los productos y eran bastante difíciles de interpretar si no estabas muy versado en este tipo de cuestiones.

El sistema del Nutriscore pretende hacerlo sencillo, sin embargo, no está exento de polémica.

Nutriscore etiqueta por colores a los productos alimentarios, de verde (adelante) a rojo (stop) como una especie de semáforo nutricional. Y además, etiqueta por letras, desde la A (óptimo) a la E (podría ser mejor).

En resumen, si un alimento tiene una E naranja es muy poco sano, y si tiene, por ejemplo, una B verde es sano.

¿Cómo se decide esta etiqueta?

Según la Federación Europea de Dietistas y Nutricionistas el sistema sigue un criterio por raciones de 100gr de producto.

Es decir, si un producto contiene x cantidad de azúcar, que excede el limite recomendado de consumo al día por la OMS, ese alimento será considerado poco sano.

El origen de la polémica es que se producen resultados discutiblemente adecuados, como por ejemplo que una bebida gaseosa edulcorada tenga la categoría de Verde y una A o B, y que el jamón serrano aparezca en la parte de los Naranjas o Rojos con letras D o E. Quienes defienden el sistema ponen en valor que es un sistema que ayuda a comparar productos del mismo, es decir, si tu no te decides entre dos marcas de jamón serrano puede que su semáforo nutricional te ayude a elegir que jamón metes en tu cesta de la compra. Pero no tiene sentido comparar dos productos distintos en el semáforo nutricional.

Sus detractores hablan de desde el comienzo se habló de que si se pudieran comparar productos ya que todos están categorizados bajo los mismos baremos.

Y que es poco entendible que productos ultraprocesados como los refrescos aparezcan con buenos valores en el semáforo, y alguien pueda entender que son perfectos sustitutos del agua, y sin embargo, el aceite de oliva tenga una categoría Roja o E por tener mucha grasa.

Como veis es un tema espinoso y lleno de polémica, del que tendremos que ir viendo como se desarrolla en los próximos meses.

Desde Saludando os proponemos seguir leyendo sobre el tema, entrar en la polémica y reflexionar sobre el estilo de alimentación que te lleva a tu genuino equilibrio. Creemos en la alimentación consciente y en la alimentación saludable. Ahí fuera hay gran cantidad de opciones, todas podrían tener un poco de espacio en la alimentación, pero unas de manera mucho más recurrente y otras de manera mucho más ocasional. No te autoengañes.